DESEO INNOVADOR
Desde hace mucho tiempo, se viene hablando del descenso del número de espectadores en los conciertos de música clásica y, lo que es más preocupante, de la poca presencia de gente joven en esos actos. Evidentemente, no estamos desvelando ningún secreto, como tampoco tratamos de ignorar las diferentes ideas y trabajos expuestos para paliar ese problema.
Una muestra de ello la hallamos en el artículo de Joan-Albert Serra “Juventud y música clásica” – revista “Scherzo”, noviembre 2013 –. En un momento determinado, dice su autor: Se puede aducir que esta situación es debida, en gran medida, a la falta de cultura musical de los jóvenes y del público en general, pero el grave error es pensar que los únicos que tienen que cambiar y educarse son los oyentes. ¿Qué es lo que no ha cambiado prácticamente nada en las últimas décadas? Sin duda el formato de los conciertos sinfónicos o de cámara, su ritual, el repertorio y la forma de presentarlo, la interacción con el público, la distribución física de las salas e incluso la actitud de los propios músicos.
Desde esta Sociedad queremos sumarnos a esa posible meta innovadora, aportando uno o varios granos de arena – pequeños o grandes, según se estime – con el único objeto de obtener los mejores resultados de cara a nuestros asociados y público en general.
En síntesis: deseamos, en primer lugar, que cada una de nuestras temporadas tenga un leitmotiv o asunto tanto aglutinador como diferenciador en la programación – sin olvidar el tipo de obras que se ha venido observando hasta el momento –, y que, en segundo lugar, dentro de ese objetivo, podamos ofrecer lo más novedoso en cuanto a intérpretes y grupos de cámara, ya que, como es sabido, es dentro de esos solistas y agrupaciones en donde nos movemos desde hace mucho tiempo.
Imaginemos lo que podrían ser los próximos años en la programación de conciertos. Temporada 2017/2018: en agosto de 2018 se celebra el centenario del nacimiento del compositor norteamericano Leonard Bernstein. Un motivo más que digno para ofrecer una buena muestra de su obra a base de conjuntos de cámara, tales como un trío, un quinteto de viento o un cuarteto de saxofones con acompañamiento de piano. Con motivo del centenario del autor de “West Side Story”, se podría contemplar la programación de otros compositores de todo el continente americano; no en vano, también en “Scherzo” y firmado por Javier Pérez Senz, hemos leído esta importante manifestación: La energía que la música clásica tiene en América Latina contrasta con el lento deterioro que sufre en la vieja Europa, sacudida por la crisis y el desinterés de las nuevas generaciones… Conviene abrir las puertas a toda esa energía que nos llega del otro lado del Atlántico… Y si a todas estas consideraciones sumamos el centenario del fallecimiento del compositor Claude Debussy, no cabe duda de que se podrá dibujar una más que atractiva temporada.
Temporada 2018/19: ¿Por qué no seguir insistiendo en la música del continente americano y contemplar, en coincidencia con el bicentenario del nacimiento de Clara Wieck – también conocida como la esposa del músico Robert Schumann – la posibilidad de crear un gran ciclo dedicado a la mujer compositora? Temporada 2019/2020: para ella ya estamos trabajando, pues se cumplen no sólo 250 años del nacimiento de Beethoven, sino el 175 aniversario de nuestra Sociedad, la más antigua de España. Y si todavía tenemos ganas de ampliar el horizonte un año más, nos encontraremos con el centenario de la muerte de Camille Saint-Saëns, compositor, al igual que Leonard Bernstein, muy identificado con Gran Canaria entre finales del siglo XIX y comienzos del XX.